jueves, 2 de julio de 2009

Los poemas con él


      Mondrian


      ELEMENTOS


      Y así es cómo el clavel
      expulsa su color,
      y expulsa su color el corazón del aire,
      y la sangre del cadáver,
      y la hoguera del labio
      y el ácido estupor de la amapola expulsa su color,
      rojo,
      rojo y vegetal,
      rojo y solitario,
      rojo y mortal,
      rojo enamorado,
      rojo en el frágil trasluz de la retórica,
      rojo hasta anegar la espesa encarnadura del atardecer.

      Entre una línea negra densa de incertidumbre.

      Y es así cómo el cielo
      reafirma su color,
      y reafirma su color la pluma de ave,
      y la soledad de la ballena,
      y la penumbra del sulfato
      y el acéfalo frío de la escarcha reafirma su color,
      azul,
      azul y celestial,
      azul y volandero,
      azul y pleamar,
      azul polvoreado,
      azul en la escondida frivolidad del agua,
      azul hasta inundar la estética carnal de la inocencia.

      Entre una línea negra densa de incertidumbre.

      Y así es cómo el azufre
      irradia su color,
      e irradia su color la sed de la palmera,
      y la envidia del trigo
      y los sinoes de la margarita irradian su color,
      amarillo,
      amarillo y solar,
      amarillo eruptivo,
      amarillo y limón,
      amarillo entre espigas,
      amarillo en la infame mendicidad del oro,
      amarillo hasta colmar el nombre de la luz con su avaricia.

      Entre una línea negra densa de incertidumbre.

      Arriba y abajo.
      Una línea negra densa de incertidumbre.
      A un lado y al otro.
      Una línea negra densa de incertidumbre.
      Y aún así: rojo.
      Y aún así: azul.
      Y aún así; amarillo.

          JESÚS PINO

      4 comentarios:

      Anónimo dijo...

      Físico y... alquímico; aquí está otro todoterreno de la poesía. El que no se da importancia. La inteligencia, la corrección, la bondad. Pareja literaria donde las haya, resultado:HERMES y ULISES surcando todos los mares. Dixit.-

      Anónimo dijo...

      rojo y amarillo y azul.. impactante.

      yole dijo...

      Me adentro en las palabras que siembras...son luz.

      Saludos nuevos.

      Jose Antonio G. Villarrubia dijo...

      El otro día leí una entrevista de hace unos años a Avigdor Arikha, decía una cosa muy curiosa sobre Mondrian, un elogio sin duda.
      Venia a decir más o menos, que Mondrian habia vaciado de objetos la habitación de Vermeer... pero la había cerrado dejándose las llaves dentro.