Fragmentos de Las olas, tu libro preferido:
“Cuan extraño es sentir cómo el hilo que de nosotros surge se
adelgaza y avanza cruzando los nebulosos espacios del mundo que entre nosotros
media. Se ha ido. Aquí estoy, en pie, con su poema en la mano. Entre él y yo
media el hilo. Pero ahora, qué agradable es, cuánta confianza infunde, saber
que la ajena presencia ha desaparecido, que la escrutadora mirada se ha
apagado, ha sido cubierta por una capucha…Con qué satisfacción cierro las
ventanas y me niego a recibir otras presencias. Con qué satisfacción advierto
que, de los oscuros rincones en que se refugiaron, vuelven esos desastrados
huéspedes, esos parientes, a los que él con su superior poder obligó a
ocultarse. Los burlones y observadores espíritus que, incluso en la crisis y la
vacilación del momento, se mantuvieron vigilantes, vuelven ahora en rebaño al
hogar. Con su ayuda soy Bernard, soy Byron, soy esto y lo otro. Como en
anteriores tiempos oscurecen el aire y me enriquecen con sus bufonadas y sus
comentarios, nublando la hermosa sencillez de mi momento de emoción. Sí, puesto
que yo soy más yos de lo que Neville cree. No somos tan simples como nuestros
amigos quisieran para satisfacer sus necesidades. Sin embargo, el amor es
simple. (…)”
No hay comentarios:
Publicar un comentario